voy a volar
buscando al sol en tu vientre
voy a viajar
cayéndome al mar
voy a volar
más allá de nuestros sueños
voy a viajar
en un baño de sal
y desaparecer
y un resplandor
junto a las estrellas bajo el mismo sol
derritiéndome
suenan y retumban incluso aturdiéndonos en silencio tantas cosas...
la música puede morir y en esa pausa eterna las luces estallar en pedazos...
soñar desplegarse incluso en lugares inhóspitos y desorbitados tan surreales como el amor, el deseo, los sueños...
estoy aquí a los pies de las estrellas irrigándome inundándome de dolores ajenos proyectados en el jardín como credenciales del terror más propio
tantos hay dentro
tanto hay dentro
el infinito está adentro
las máscaras no existen en el jardín
y la esencia
la vendimia inmaculada se cae de mi
y quiere escucharme
se arrodilla, me lame, me excita y me pierde
vuelvo atrás y siempre avanzo voy en busca del sol
voy en busca de tu voz
llegar y permanecer inquieto fugaz
tétrico milimétricamente perfecto en la imperfección de los impulsos en los lugares más recónditos donde las caídas son ascensos y el sonido puro puedo escucharlo
y las palabras puras y pensamiento netamente poéticos me pertenecen
AHORA!!!!!!!!
en el olvido
la actuación,
un cuerpo candente se esfumó en el silencio
los pies tiznaron las nubes del sueño resplandeciente
el camino como una sorpresa
al límite del deseo
un cuerpo invisible dibujó siluetas en el viento
sus manos atravesaron el tiempo
las lágrimas cayeron al suelo
al límite de los sueños
un ángel fugaz recorrió el cielo del infierno
sus labios de seda marcaron el fuego
y sus alas se ardieron
al limite de los sueños
el ángel explotó
y sólo quedó su sombra
al límite de los sueños
sombras de besos que alimentan
deseos de armonía
y baños de sangre
ya no existe
tampoco el mar
el alma insana busca asilo
y no ha desterrado
el don de los dioses
ausentes del camino nocturno
que se hunde en el celo
y los velos de dios
yo vi sus manos en el aire
buscando un lugar
bajo su vestido verde,
los secretos
y la seda de los brazos
desprendidos como piel
azotan el juego,
tan solo el brillo
no es tu lengua
sino el sol que muere,
que solo irradia muerte
la playa quemaba en los sueños
y la arena deslizada en mis venas
como un baño ritual,
ácidas las lluvias
los colores adornan mi cuerpo
un aroma natural
camino en la inseguridad de los rayos
crucificando el juicio hiriente
dejo de llorar y bien
el viento pesa en efecto
la luna en el rostro fugaz
¿dónde entonces los lazos?
me hubiera gustado acertar en ese plano
tenía la mirada perdida en conflictos
los pasillos superpoblados de ruidos y caos
necesitaba salir
las marcas de la lluvia en el ojo de la tormenta
una mancha de sangre que nunca haz querido sanar
¿por qué podrías estar preguntándome esto?
que puedo hacer?
hasta ahora caigo en libertades maravillosas
en sueños en los que la realidad camina tan bien…
los tambores en la tribu incitan al demonio
similitudes de la distancia un trecho tan angosto
la banquina del cielo al infierno ha sido tan solo un beso
un hombre perdido en el cambio y alrededor los años
las manos no vieron los fantasmas
por favor si has de besarme no digamos mi nombre,
solo tápame los ojos
intentaré imaginarte,
oler tu voz
¿por qué podrías estar preguntándome esto?
en la edad del desastre la historia se burla una vez más
y la sensibilidad me vence, no se como matar al día
intentaré callar el fantasma, pero el alma teme morir
el peligro de la puerta esta atado a los recuerdos
del otro lado del bosque en los dorados
estábamos ambos juntando flores
nunca nadie había vuelto a plantearme esto
¿por qué podrías estar preguntándome esto?
los vestigios de la luna desfilan por el mar trazando líneas imaginarias que asilan vidas incitando a sumergirse en el camino…
en el aire la luz es una estela
el vestigio de si misma,
resabio de versos disparados al aire
un temblor
no falta el aire, más bien no sobra...
quizás por que los silencios hablan
como años luz frente a frente
detenidos los suspiros y el alcohol
un resplandor que dibuja el surco de tus labios en el roce
de mi boca en el frío de la ciudad...
el misterio no figura atado a la suerte
por que es la suerte misma
la piel se distrae con los dedos que rozan tu cuerpo
y desvisten tu alma pulverizándome
por el temblor que me siente
en desatados discursos
creyendo quizás en el impulso
de sentir y ser
lo que los gritos también dirían
desafiar a las flores del bosque con los rayos de luz que enamoran...
la luna baila
sumergida en la noche
de nuestros sueños
de alguna manera
(en todas)
el filo de los labios
corteja y desfila frente al abismo del error
incitado quizás por las gotas dulces del sentir...
los precipicios del alcohol
desafían la distancia
figuran puentes de cristal...
infinitos en el viento
sin tiempo ni necesidades
más que sueños que no se rompen
sumergidos se estremecen en el sentimiento puro
las sombras se pierden en él
desnudo de la esencia
en el respaldo del amor que no se olvida
pues la música también es silencio
y la misma oscuridad
estalla y es luz
en los besos con licor!
la rapsodia de las formas me desconcierta incluso perteneciendo al movimiento estático que permanece invisible frente al espejo…
navego en el desierto celebrando a mi sombra que baila antes que yo
¿cómo?
sucio
embarrado de salvarme en la incondicionalidad perpetua
en un transito sin límites ni vértigos que desarmen a los recuerdos que le quiten mérito
las horas son mágicas y los minutos y los segundos y la zaga de viajes y vuelos en los que sea una soñadora en busca de esos acordes
de ese arpegio profundo en él lo púrpura es más que enfermo,
las piedras rompen cabezas
pero las palabras y el silencio así como la lluvia las nubes y el sol no pueden verse en tu mente
ella es eléctrica
aúlla y es tan extraña...
las puertas y los párpados
los telones y el dejar hacer
lo jinetes pueden quemarme pero el fénix renacerá,
además
sus alas tuvieron lugar en mi mente...
por lo que
son meros flagelos de mi extrañas huellas,
la sangre cae y el verano avisa que vendrá
las hojas renacen como plegarias de sueños latentes encriptados en el aire que buscan ser decoficados,
la ceguera brillante se vuelve azul asumiéndose como cielo en tonadas femeninas que me miran y dicen "aquí" la palabra, el silencio, el beso, el deseo, la música,
la poesía, propia, perfecta, personal y ajena...
como un diamante que juega en la posesión de los ojos perdidos en él
estrella como consigna
una fiesta blanca con caras que se pierden
se desdibujan como retazos de humo de colores
lienzos de aire,
baila y tiene miedos
imagina
el alma que cosecha misterio conociéndose y reinventándose en pasos que se pierden en el agua,
en vivencias que incluso resucitan en el final...
decadentes:
los ojos perdidos en las palabras libres efímeras e inconexas en los impulsos tribales que se suceden y seducen como diamantes negros con rulos bucles y besos ficticios...
sumido en un viaje comienzo a rodar como un carrusel siendo pura y exclusivamente alma a esta velocidad abriéndome al silencio
