viernes, agosto 29, 2008

Permiso:

Un millón de manos esperaban por verte
y mis labios se cayeron dentro tuyo
y sin mirarte más que a vos...

-Viento, ¿Dónde estás?
-Acá estoy, despertándome.
-¿Sos púrpura mi amor?
-Estoy viéndome en las palabras.
-Es que yo soy el verbo.


Incandecente.
Candente.

Nada es tan incierto
Nada es tan certero.
Brillo en la luna.
En tus rayos de sol
nacen del éxtasis los pétalos de luz
los besos dorados que me queman,
abierto a tu corazón
desliz fugaz:
intermitente,
el romance perdura
el encierro nunca estuvo por acá
volar
si volamos como el viento
volamos en el viento.